lunes, noviembre 06, 2006

Auque no lo crean.

Ella es fea.
Mira al mundo de reojo, un poco avergonzada. Se dice: “¿en qué estás, mundo?”, y en los ojos se le dibuja una sonrisa; nunca en los labios, demasiado tímida. Camina un poquito, midiendo cada paso, cada gesto, se sienta en su banco y ahí espera que empiece la clase; hoy le toca algún filósofo que la aburre. La aburren todos esos hombres que hablan y hablan, ninguno sabe callar, piensa ella, ninguno sabe escuchar. Luego se queda un poquito en silencio, y repite: “de verdad, ninguno sabe”, y abre su cuaderno para anotar algo.

Ahora llueve despacito, a través del vidrio ve su reflejo. A ella le gusta pensar eso, que el reflejo está a través y no sobre; le gusta creer que se va lejos mientras mira el espejo y se encuentra con su cara. Se encuentran las dos, allá lejos, ella la mira y su cara también: “qué feas somos”, le dice, y nada le quita la sonrisa de los ojos. Pero está triste; sonriente y triste.

Yo supongo que es porque no sabe que la miran, y piensan: qué fea, pero cómo me gusta. Es un él cualquiera, que espera por la clase y mira. A veces mira otras cosas, pero por lo general es sobre ella donde le gusta volcar su atención. Encontrarse con esa nariz desentonante, divertirse con algunos de los gestos que no puede encontrar en otra parte y acabar diciéndose que igual no la va a conocer porque seguro que…

Cuando vuelve a su casa, a él le gusta pasarse por una panadería cualquiera, una que siempre se cruza. Ahí adentro lo espera una chica con unos ojos increíbles. Lo espera porque él pasa más o menos a la misma hora, casi sin querer. Más allá de sus ojos, él no notó otra cosa. Pero ella lo vio un día abrirle la puerta a una señora, y quedarse pegado a la puerta porque vino un tropel de niños, señoras, señores y otros bichos más raros todavía; pero él se quedó ahí, sosteniendo la puerta, un poco con cara de tonto, y eso fue suficiente: ya no se lo pudo sacar de la cabeza.

Compra los criollos y sigue su rumbo. Ella le mete un suspiro en la bolsita, pero él jamás lo nota.

Y sigue, no son los únicos.

… pobres… pensar que están tan listos y, sin embargo, miralos.

Yo creo que igual la pasan bien.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

En el principio sentí mucha ternura por los personajes, aislados y enamorados. Sin embargo despues percibí que la historia perdía fuerza, en especial por el final que a mi parecer es muy choto en comparación a lo que se venia narrando, en especial la última frase

"Yo creo que igual la pasan bien."

Como que esta super descolocado y parece que fue un final hecho sin ganas o con ganas de cerrar el cuento nomas ^^
Yo igual te quiero muchoooo (K)

Anónimo dijo...

Uy a mí el final fue justo lo que hizo que me gustara tanto. Me dio la sensación de como que te lo cuenta algún vecino indiscreto, como algo vanal que no tiene la más absoluta importancia, casi ni de anéctoda.

"Yo creo que igual la pasan bien."


:D

Un saludito

Juan Pablo Alvarez dijo...

faa...a mi tambien me gusto mas el final, es decir, la segunda mitad...
Digo, la primera parte para mi no tiene sentido sin la segunda, porque como que le da sentido.

"… pobres… pensar que están tan listos y, sin embargo, miralos." Es como que esto es lo que estructura todo; los personajes son como esas bolas de hierro que vimos en el museo de los niños que esta en la vieja usina (jeje, nunca entramos, lo vimos desde afuera), donde cami nos conto que dejo la mano puesta y se hizo mierda. Una pelota esta ahi, tan separada de la otra, y despues una choca a la otra y le comunican algo. Es como que eso del amor y de la soledad se comunica y articula a cada uno de los personajes de una forma parecida, conectando historias y modos de narrar separados...Puede no ser el "sentido", pero es por lo menos una de las razones por la que me gusto mucho este texto, ademas del hecho de que no sobreexplica ni dice "lavabo"...
La unica critica es que no me gusta el titulo, el cual es una gandorcha porque no "sirve" (no es "practicamente" util), pero no puedo decir nada porque a mi me cuesta tambien hacerlos =P

Juan Pablo Alvarez dijo...

Ah, y yo creo que es un cuento

Faro dijo...

jajaja, el título iba a ser "hoy seba dibujó un ogro y yo lo pinté", y al final iba a meter el dibujo.

Y también... me pregunté si era un cuento o qué cosa. Y puede ser que lo sea... a ver... en una de esas puedo cambiarlo.



PD: La palabra de verificación que me toco es QSYRB que se si se lee raro dice: Que sirve.













(?)

Faro dijo...

ma'sí, yo le meto todas las categorías